VENTAS

  1. “La mayoría de las personas piensan que “vender” es lo mismo que “hablar”. Pero los vendedores más efectivos saben que “escuchar” es la parte más importante de su trabajo” – Roy Bertell.

En tiempos de crisis, las ventas se convierten en el pilar más importante para el crecimiento y la supervivencia de cualquier empresa. Es necesario replantear las estrategias en ventas para adaptarse al entorno cambiante y mantenerse competitivo.

 

Según un artículo publicado en el New York Times, las empresas que han sobrevivido a las crisis económicas son aquellas que han sido proactivas en la reevaluación de sus estrategias de ventas y han encontrado maneras de generar nuevos ingresos en medio de la incertidumbre.

Una de las estrategias más efectivas es la diversificación de los productos y servicios ofrecidos por la empresa. Esto puede implicar la creación de nuevos productos o la expansión en nuevos mercados y segmentos de clientes. Por ejemplo, en lugar de depender únicamente de la venta de productos de alta gama, una empresa puede considerar la venta de productos más económicos y accesibles para atraer a un público más amplio.

Otra estrategia es el fortalecimiento de las relaciones con los clientes existentes. Es menos costoso mantener a los clientes existentes que buscar nuevos clientes en tiempos de crisis.

 

 Las empresas también pueden aprovechar la tecnología para mejorar sus estrategias de ventas. Según un estudio de Harvard Business Review, el 77% de los compradores B2B (business to business) declaran que no hablan con un vendedor hasta que han realizado su propia investigación. Por lo tanto, es importante que las empresas tengan una presencia en línea sólida y que ofrezcan información útil y valiosa a sus clientes potenciales.

 

En resumen, las empresas que tienen éxito en tiempos de crisis son aquellas que son flexibles y están dispuestas a adaptarse a las circunstancias cambiantes. Al diversificar los productos y servicios, fortalecer las relaciones con los clientes y aprovechar la tecnología, las empresas pueden mantenerse competitivas y asegurar su crecimiento a largo plazo.